Aunque no lo parezca, o lo pasemos por alto, las furgonetas son, han sido, y serán, protagonistas de nuestra vida diaria. Tanto, que existen prácticamente desde que el automóvil vio la luz hace ya dos siglos. Adaptaciones de coches normales a furgonetas o pick-ups fueron una constante por la necesidad de transportar algo más que personas. Incluso antes, ya había vehículos comerciales de todo tipo tirados por caballos…
Y esa evolución pasó a ser en el algún momento del siglo pasado una “necesidad” de movilidad hacia el ocio. La camperizaciones empezaron a formar parte de la vida casi que cotidiana, hasta el actual auge. Por ello, furgonetas míticas que ya tienen varios aniversarios en su haber, como la Iveco Daily (casi 50 años), la Ford Transit o las Citroën C25, Peugeot J5 y Fiat Ducato hace ya varias décadas que nos acompañan en nuestras ciudades y carreteras… también en versión autocaravana. Es verdad que quizás la más recordada es el Volkswagen Transporter en sus diversas adaptaciones. Pero no es la única, ni mucho menos.
Precisamente de esta última marca y modelo, es quizás de la que más se haya extendido el uso de las transformaciones en autocaravanas o camper de todo tipo. Pero también está la versión Marco Polo de Mercedes, que este 2024 cumple precisamente su 40 Aniversario. Ahí es nada porque nació como la “Bremer Transporter” soportada sobre una Mercedes T1 en 1984.
La Mercedes T1 salió al mercado en 1977, año de su comercialización, con las denominaciones 207 D, 208 de gasolina, 307 D y 308 de gasolina. Más tarde, en septiembre de 1981, Mercedes lanzó los modelos 407 D, 409 D, 410 y 4,6 y luego las 209, 309 y 409 D con el famoso y duradero motor diésel de cinco cilindros, el famoso OM617, que tanto juego dio a Mercedes también en sus turismos como por ejemplo en los W123.
MERCEDES T1 “BREMER TRANSPORTER”, LA PIONERA DE LA MARCO POLO
Corría el año 1984 y Mercedes unía el nombre de su T1 209 al del conocido explorador veneciano Marco Polo (Venecia, Italia 1.254, Venecia, Italia 1.324) en una furgoneta. Se trataba de dotar no solo de un equipamiento único a dicha furgoneta, también de la posibilidad de viajar con la casa a cuestas y de sobredimensionar los sueños de viajar, amén de una fiabilidad todavía hoy destacada de su motor. Para Mercedes, “el Marco Polo ha establecido estándares en su segmento, inicialmente basado en la furgoneta «Bremer Transporter» y desde 2015 en el Clase V”. Y es que la evolución ha sido constante.
Es verdad, la Transporter de Volkswagen no solo es su gran rival, también es más conocida a través de esa lógica evolución de los modelos también en el mundo camper (T1, T2, T3, T4, etc.). Pero no es menos cierto que el que las versiones Marco Polo de Mercedes son tremendamente reconocidas en su sector, amén de por sus costes de adquisición igualmente altos y de calidad. Una Mercedes Marco Polo, sea de las primeras o de las posteriores, no es barata.
El nombre de “Bremen Transporter” se acuña porque inicialmente aquellas T1 se hacían en la ciudad alemana de Bremen. Para Mercedes, en la década de 80 del siglo pasado, “el primer Marco Polo fue una de las autocaravanas compactas que definieron el segmento. Sus rasgos característicos: El capó rechoncho, la pintura beige Bahama y el interior beige-marrón, que se consideraba un ´imprescindible´para los campistas más exigentes de la época”.
Es cierto, aquel color marrón exterior define perfectamente a estas furgonetas porque las hace instantáneamente reconocibles allá por donde pasan. La dimensión en altura de aquella primera “Bremen Transporter” Marco Polo era de nada menos que de 2,97 metros para que cualquiera pudiera estar de pie dentro (incluso más, mucho más, que en las Marco Polo posteriores) y son fácilmente identificables igualmente precisamente por ese techo tan alto del preparador Westfalia. En 1998 fue objeto de una actualización, restyling o como quiera llamarse.
Por aquel entonces, y ahora, la Mercedes Marco Polo incluía en su transformación, o más bien adaptación a casa rodante, elementos como la cama del techo, los asientos delanteros giratorios, cocina, fregadero, nevera, asiento/banco detrás (otra cama), armarios, cajones y más cosas propias de este tipo de vehículos. Con el tiempo, como es normal, se han mantenido y ampliado esos elementos en las camper actuales, amén de su mayor nivel de tecnología y sofisticación.
De hecho, una evolución lógica es una VAN eléctrica por parte de Mercedes: “Uno de los temas centrales para el futuro del Marco Polo es la electromovilidad. Mercedes-Benz Vans ha anclado firmemente su pretensión de liderazgo en electromovilidad en su estrategia. El paso central hacia el futuro eléctrico es la nueva VAN. EA, modular «solo eléctrica”, que se introducirá a partir de 2026. Basado en VAN. EA, la gama de vehículos recreativos también se electrificará. Sobre la base de VAN. EA, Mercedes-Benz ofrecerá vehículos recreativos totalmente eléctricos de tamaño mediano y grande en el futuro.” O sea, que el futuro inmediato de la Marco Polo pasará también por enchufarse a la red.
LA EVOLUCIÓN DE LA ESPECIE, VITO, VIANO…
Cómo decíamos, era lógica una evolución de la especie. Más si consideramos el alto crecimiento de las autocaravanas en Europa, y ahora también desde hace unos años en España. Por tanto, Mercedes aplicó el concepto y el nombre de Marco Polo a los consiguientes modelos herederos de la T1, fueran o no en realidad las siguientes generaciones de este modelo.
Por ejemplo, en 1996 aparecía la segunda generación de la Marco Polo. Lo hacia basándose en la Mercedes Vito con una importante reducción en altura del techo (menos de dos metros) que conllevaba la introducción del techo elevable. Con ello, se mataban varios pájaros de un tiro: menor altura en todo momento, mejor aerodinámica para viajar y menor consumo, posibilidad de entrar a garajes más bajos, mayor adaptabilidad a cada necesidad de movimiento… Como también dice Mercedes “El concepto básico de vida del Marco Polo ha permanecido inalterado desde la primera generación”.
Como es normal, las funcionalidades interiores y los materiales también aumentaban en todos los sentidos. Para Mercedes, en la evolución del concepto autocaravana/camper en el modelo Vito, “el interior se volvió considerablemente más funcional: La combinación de asiento/litera en la parte trasera estaba montada en un sistema de rieles y se podía mover. Los armarios estaban equipados con prácticas persianas enrollables. La mesa se podía guardar en el revestimiento de la puerta corredera, y había entre los asientos delanteros un fácil acceso a la parte trasera gracias a un freno de estacionamiento situado junto a los pedales accionado con el pie. En 1999 recibió una nueva actualización”.
De la Vito a la Viano. Así es, las Marco Polo permanecieron en las denominaciones Viano desde 2003, o lo que es lo mismo, la tercera generación: “avanzó aún más en términos de funcionalidad y volvió a establecer nuevos estándares en el segmento de las autocaravanas. Un techo elevable de accionamiento eléctrico, una cómoda cama de techo con elementos de resorte elásticos, galardonados con el sello de calidad ´Aktion Gesunder Rücken` por su diseño respetuoso con la espalda, y un banco trasero con respaldos plegables eléctricamente, así como cojines de aire en los refuerzos del asiento para un mejor soporte lateral fueron solo algunas de las numerosas mejoras. De nuevo en 2010 recibió una nueva actualización”. La evolución ha sido, es, constante, como era de esperar, a través de los modelos de la marca.
Tanto que en 2015, la Marco Polo se encarna ahora sobre la llamada Clase V: “La cuarta generación del Marco Polo, basada en el monovolumen Clase V, estableció nuevos estándares en términos de estética y confort. El interior se transformó en un salón exclusivo, desde el salpicadero hasta la sala de estar. Los aspectos más destacados también incluyeron suelos imitando la cubierta de un yate, iluminación interior ambiental LED y unas amplias posibilidades de personalización. Desde su actualización en 2019 y posteriores, el Marco Polo también ha ido incorporando más tecnología, incluido el innovador sistema multimedia MBUX (Mercedes-Benz User Experience) y la avanzada unidad de control camper MBAC (Mercedes-Benz Advanced Control), que transforma el vehículo en un hogar inteligente para viajeros y nómadas digitales”.
Y es que cosa suma y sigue actualmente: “El nuevo Clase V Marco Polo, que se presentó en el verano de 2023 y en su lanzamiento al mercado es este año incorpora aún más novedades. Entre otras cosas, su nuevo diseño y mayor calidad en el exterior y el habitáculo, así como por sus MBUX y MBAC mejorados, que ahora ofrecen nuevas funciones, como el control inteligente del control de nivel AIRMATIC en modo camper. Por lo tanto, el nuevo modelo permite una experiencia de “glamping” inigualable”. Es más, Mercedes “adquirió” para su haber un modo de hacer camper una versión de este tipo de vehículos, el llamado Marco Polo Module que transformaba este vehículo de uso cotidiano a microcaravana en un momento, en una tendencia que ya existía en el mercado para acercar a los usuarios la posibilidad de hacer una versión camper de algunas frurgonetas de forma sencilla y más asequible.
Desde el año pasado, “el llamado Marco Polo Module completa la familia Marco Polo en el extremo inferior. Transforma las pequeñas furgonetas y monovolúmenes con la estrella Citan y Clase T, en microcampers en un abrir y cerrar de ojos. El módulo se encuentra en el maletero del vehículo y se fija con argollas de amarre. El módulo consta de una unidad de cama estándar para dos personas y una unidad de cocina opcional con fregadero y cocina de gas. Si se desea, también se puede agregar una nevera y se acomoda en la unidad de cocina. Otras características opcionales incluyen una batería auxiliar, el paquete para dormir con cortinas y rejillas de ventilación con mosquiteras para las ventanas y bolsillos que se pueden instalar entre los pilares C y D; también una mesa y sillas de camping. La mesa puede instalarse en el exterior o fijarse en la parte trasera.