Citroën ë-Jumper

Citroën sigue apoyando y ayudando a los clientes de sus versiones comerciales mediante un extenso programa de servicios integrales para que el cliente pueda adquirir y usar cualquiera de sus vehículos con la máxima facilidad y garantía. Entre ellos destacan servicios de mantenimiento preventivo que facilitan la gestión de la flota gracias a la plataforma Free2Move, mediante la cual, y en combinación con la aplicación Ë-Routes, es posible planificar de la forma más fácil posible los trayectos, calculando siempre la distancia máxima que es posible recorrer con la carga de la batería que dispone el vehículo en cada momento y ofreciendo al mismo tiempo las localizaciones para cargar nuestro vehículo según el trayecto que vayamos a realizar. Citroën Drive, a través de la conectividad del sistema de infoentretenimiento, informa constantemente y en tiempo real de la información de tráfico, presencia de radares o incluso plazas de aparcamiento disponibles en el lugar de destino. A todo ello hay que sumar servicios de financiación a la medida del cliente, diferentes seguros de vehículo o crédito que se pueden contratar directamente a través de Stellantis, gestión de multas, protección del carnet de conducir, extensiones de garantía, servicios conectados online que te garantizan tranquilidad hasta diez años después de la compra del vehículo gracias a una amplia oferta de accesorios que permiten adaptar el Berlingo Van a casi cualquier necesidad e incluso transformaciones especiales.

Además de motorizaciones Diesel con 120, 140 y 180 CV que por primera vez están disponibles con un cambio automático de 8 velocidades —para los dos motores más potentes—, el Jumper también ofrece dos alternativas de propulsión completamente eléctrica. Una de ellas emplea tecnología de pila de combustible en la cual se produce corriente eléctrica disociando el hidrógeno que el Jumper repostaría en sus tanques logrando autonomías de hasta 400 km. Por su parte, la versión de baterías ha sido reforzada con la incorporación de un motor más potente y un nuevo paquete de baterías, ya que permite autonomías mucho mayores. Ambas tecnologías demuestran el compromiso del grupo Stellantis por adaptar la movilidad sostenible al transporte de mercancías, y que en el caso de vehículos comerciales, supone también disfrutar de grandes ventajas en cuanto a costes de uso, de mantenimiento, facilidad de conducción, versatilidad en el transporte de mercancías pesadas o mayor comodidad durante la conducción. Para garantizar una movilidad total y prestaciones acordes con la capacidad de carga del ë-Jumper, Citroën ha sustituido el anterior motor eléctrico de 90 kW/122 CV por una unidad de nueva generación que desarrolla 100 kW/270 CV, aumentando también el par de 260 Nm a un valor de 400 Nm. Por su parte, las dos baterías anteriores que podría equipar, con una capacidad máxima de 70 kWh, se han reemplazado por otras con 110 kWh, con las que consigue autonomías de hasta 430 km. Es un radio de acción que garantiza no solo un uso intensivo del ë-Jumper dentro o alrededor de la ciudad, sino también perfectamente válido para poder desplazarse a distancias mayores en tanto en cuanto sus baterías disponen de tecnología de carga rápida en corriente continua, admitiendo potencias de hasta 150 kW, lo cual permite realizar cargas del 0 al 80% de la capacidad de la batería en solo 55 minutos. El ë-Jumper dispone además de un cargador embarcado de serie que permite alimentar la batería a potencias de hasta 11 kW, o equipar el opcional de 22 kW, pudiendo realizar recargas del cien por cien de la batería en tiempos que oscilan entre las 12 y las 6 horas, respectivamente. Sería el tipo de carga más adecuado para flotas que, por ejemplo, se inmovilizan por la noche o interrumpen sus servicios durante horas, ya que permiten que la batería cargue de forma lenta y lineal prolongando su rendimiento máximo el mayor tiempo posible. El ë-Jumper ofrece tres posibles modos de conducción que se seleccionan desde un mando ubicado en la consola de mandos, los cuales permiten modificar la entrega de potencia del motor para adaptarla a diferentes necesidades. Es especialmente útil cuando, por ejemplo, necesitamos la máxima suavidad al poner el vehículo en movimiento u optimizar el rendimiento para conseguir el máximo alcance posible de la batería, utilizando en ese caso el modo ECO con potencia limitada a 120 kW/163 CV. Con el modo Normal utilizamos casi 160 kW/220 CV de los 200 kW/270 CV disponibles, siendo el modo de conducción más habitual incluso aunque circulemos con cargas pesadas. Por último, el modo Power despliega toda la potencia disponible que es capaz de entregar la unidad eléctrica. Adicionalmente, el ë-Jumper está equipado con un sistema de frenada regenerativa con cuatro niveles que se pueden seleccionar cómodamente a través de las levas ubicadas detrás del volante, mejorando la comodidad durante la conducción y alargando la autonomía.

La Citroën Jumper es una de las furgonetas de formato medio/grande del mercado que más configuraciones ofrece para satisfacer las necesidades de clientes profesionales. Se puede elegir con dos distancias de ejes posibles, comprendidas entre los 3,45 y 4,04 metros, o tres diferentes longitudes configurando hasta seis distintas siluetas que pueden transportar entre 10 a 17 m³ de carga. En el caso del ë-Jumper, la oferta contempla versiones L3 preconfiguradas de 5,89 m de longitud y dos posibles configuraciones de altura, H2 y H3, ofreciendo una carga útil de hasta 15 metros cúbicos. La marca también ha rediseñado el habitáculo y, especialmente, su oferta en sistemas de entretenimiento con la finalidad de que el usuario pueda utilizar más fácilmente los servicios conectados. A diferencia de otras motorizaciones de la gama, el ë-Jumper emplea el sistema multimedia de diez pulgadas más avanzado, con una disposición de menús inspirada en los teléfonos móviles, pudiendo completarse, entre otras funciones, con navegación permanentemente conectada con mapas TomTom 3D que guían al usuario profesional por la ruta más adecuada y le mantienen constantemente informado de otros servicios, como el precio de los combustibles. Su cuadro de información digital de siete pulgadas permite configurar la información mediante diferentes vistas para que el conductor pueda consultar los datos deseados de la forma más sencilla, clara e intuitiva. Con la finalidad de mejorar la ergonomía, se ha añadido un cargador de teléfono inteligente inalámbrico instalado en el centro del nuevo tablero, el cual evita tener que conectar/desconectar el teléfono cada vez que se sale del vehículo. Otros extras adicionales que aportan comodidad de uso y seguridad a partes iguales son el retrovisor interior conectado a una cámara posterior y que permite tener el campo de visión trasero a la hora de maniobrar.

Los Citroën ë-Jumper disponen de serie de climatizador automático, cámara de visibilidad trasera con directrices dinámicas para ayudar en el guiado, además de sensores de aparcamiento trasero con radar de 360 grados que permiten tener una vista periférica del entorno. El control de estabilidad avanzado dispone de asistente de viento cruzado de remolque y freno postcolisión. Para facilitar la entrega de mercancías, el ë-Jumper dispone de un sistema de acceso y arranque sin llave que permite bloquear o desbloquear las puertas desde el exterior sin necesidad de apagar el motor, manteniendo, si así lo desea el conductor, el confort climático. El freno de estacionamiento es eléctrico. Además del limitador de velocidad y control de crucero adaptativo, el paquete Drive Assist añade comodidad y seguridad extra al ofrecer función de arranque y parada cuando se circula en atascos y asistente de cambio involuntario de carril. A todo ello hay que añadir medidas adicionales como la advertencia de fatiga del conductor o lectura de señales de tráfico. En el ámbito de la modularidad y carga, Citroën también propone al cliente diferentes soluciones para configurar la caja, adaptándola a diferentes necesidades de transporte. La Citroën ë-Jumper compite en la categoría de furgonetas de transporte donde probablemente la electrificación más tardará en generalizarse, debido a que, por norma general, son vehículos capaces de transportar grandes cargas y destinados a uso intensivo en largas ruta. Y si bien, Stellantis es el grupo que con la mayor oferta del mercado basado en las opciones disponibles en las otras marcas integradas en el grupo, como Opel, Fiat o Peugeot, todas ellas, en base a un proyecto común, pero con identidad propia en cada caso. Renault Master E-TECH, Ford E-Transit o Mercedes eSprinter son algunas de las principales alternativas que también disponen de versiones propulsadas por motores eléctricos y baterías.

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